No tienes que escalar una montaña para encontrar los efectos de la altitud. De hecho, muchos destinos de viaje de la lista de deseos, como Bogotá, Machu Picchu y La Paz, se encuentran muy por encima del nivel del mar, donde el aire es escaso y recuperar el aliento puede ser una lucha. Los efectos de estar a una gran altitud pueden variar desde dificultad para respirar hasta mareos, y peor en circunstancias más extremas. Dicho esto, un poco de conocimiento avanzado sobre cómo mantenerse en forma y estar seguro cuando se encuentra de vacaciones a más de 8,000 pies es esencial. Aquí hay siete consejos para visitar un destino de gran altitud.
1. Investiga tu destino.
Si realiza una caminata en el Tíbet o una excursión en Nepal, es probable que no necesite un recordatorio para investigar los efectos físicos que la gran altitud puede tener en su cuerpo. Sin embargo, aunque los destinos urbanos como Bogotá y La Paz pueden no presentarte los dramáticos ascensos y descensos que escalarán los senderos alpinos, deberías leer los efectos que puedes encontrar al volar a una ciudad que se encuentra a más de 8,000 pies.
2. Ponte en forma de antemano.
Aunque estar súper en forma no previene el mal de altura, ayuda a preparar su cuerpo antes de cualquier viaje a un destino de gran altitud. Sí, incluso los atletas pueden verse afectados por la gran altitud, pero es inteligente viajar sano con al menos cierta capacidad aeróbica bajo el cinturón.
3. Mantente hidratado.
Las grandes alturas causan deshidratación, lo que puede conducir a enfermedades agudas. Por lo tanto, en la semana anterior a su viaje, comience a consumir más agua todos los días y manténgala en funcionamiento cuando llegue. De hecho, beber más de cuatro litros al día no es excesivo.
4. Cuida tu ingesta de alcohol.
Si bien no estamos diciendo que no pueda disfrutar de una bebida aquí y allá, el alcohol deshidrata el cuerpo, por lo que es importante tener cuidado con su consumo cuando se encuentra a una gran altura. Cuando llegue a su destino, puede tardar dos o tres días en aclimatarse. Dicho esto, intente y retenga el muestreo de la bebida local hasta entonces. También es una buena idea evitar la cafeína, lo que significa que también debe planear saltarse su taza diaria de café.
5. Sigue comiendo.
Puede que tenga que renunciar al alcohol, pero al menos puede comer más. En altitudes elevadas, su cuerpo no solo quemará más calorías, sino que también necesitará la energía adicional que se obtiene al consumir carbohidratos complejos y otros alimentos energéticos de combustión lenta para que continúe.
6. Tómalo con calma.
Durante los primeros tres días de su viaje, asegúrese de tomar las cosas con calma, ya que su cuerpo necesita tiempo para aclimatarse a la nueva altitud. Incluso los paseos cortos pueden dejarlo sin aliento, así que espere unos días antes de realizar esa caminata por el camino inca.
7. Visite a su médico de antemano.
Los medicamentos que previenen el mal de altura pueden ser recetados por su médico. La acetazolamida (o Diamox) es el principal fármaco utilizado para tratar los efectos de la gran altitud de antemano, pero el paracetamol y el ibuprofeno también pueden ser útiles para calmar los dolores de cabeza que pueden surgir. Si la medicina convencional no es lo tuyo, puedes probar remedios alternativos como el té de jengibre para las náuseas, el aceite de lavanda para calmar la ansiedad y, si puedes encontrarlos, las hojas de coca, que se mastican o consumen en el té para calmar los dolores de cabeza y la falta de aire.
También te gustará:
- 7 cosas que debes saber antes de visitar Machu Picchu
- 8 alzas de la lista que te transformarán
- 8 sitios espirituales increíbles alrededor del mundo
All products are independently selected by our writers and editors. If you buy something through our links, Oyster may earn an affiliate commission.